La estructura de esta obra se contrató siendo aun empleado por cuenta ajena.
El nuevo edificio del acuartelamiento de la Guardia Real en el El Pardo, a pocos minutos del Palacio de la Zarzuela se organiza con un largo eje longitudinal cuyos extremos se vuelven para apropiarse de un espacio privado y enmarcar una vista espléndida hacia el río Manzanares.
Esa fachada interior debido a su orientación suroeste debe resguardarse del soleamiento, que en verano puede llegar a ser insoportable, por lo que se dispone una doble fachada, la exterior a base de lamas verticales, las más adecuadas ante el tendido sol del oeste, en madera de cedro rojo canadiense.
Koto se encargó del suministro y colocación de las lamas que se sujetans con uniones ocultas a base de varillas roscadas con resinas epoxi. Para soportar la alta temperatura y fuerte soleamiento se les aplica un tratamiento a base de dos manos de lasur fondo protector y dos manos de lasur de acabado, a poro abierto en base agua, con lasures con alto contenido en sólidos, muy elásticos y de alta durabilidad.